INTRODUCCIÓN AL PERFUME EN
ANANKE COSMETICS
El origen del perfume se remonta a los
principios del tiempo. El ser humano quemó maderas y resinas para
contactar con los dioses a través de su humo y también para
conseguir mejores sabores para el paladar.
A
través del tiempo su uso se ha consolidado y popularizado. A día de
hoy, somos conscientes de que los aromas evocan situaciones y
recuerdos. Muchos de nosotros asociamos ciertos aromas a seres
queridos e incluso en ocasiones, nos transportan a través del tiempo
para visualizar un momento muy emotivo y concreto de nuestra vida.
Cuando
una persona comienza a utilizar un perfume de manera constante, sus
seres cercanos comienzan a asociar ese aroma con esa persona.
Un
perfume ayuda a transmitir personalidad a la persona que lo usa, de
tal forma que otras personas perciben de ti al oler ciertos aromas.
La
fragancia que eliges respalda y apoya tu personalidad. Lo más
habitual es que aquellas personas que son extrovertidas elijan
perfumes fuertes y notorios y las
personas tímidas se decanten por fragancias dulces y suaves que
les hagan pasar desapercibidas.
Utilizar
un perfume no es algo necesario ni fundamental en nuestra vida, pero
es divertido, sugerente y sutil. Llevar un buen perfume nos
representa y además nos provoca sensaciones. Puede hacernos sonreir,
puede sorprendernos o simplemente puede provocarnos repugnancia. Lo
importante es que nos provoca sensaciones.
Un
perfume evoluciona como un ente, cambia sutilmente a lo largo de las
horas. Se adapta de forma distinta a las diferentes pieles.
Es
un arte, sutil y sugerente. Un arte etéreo donde se combinan notas
altas, medias y de corazón para crear sinfonías melodiosas, un arte
que AnankeCosmetics adora por completo.
Comentarios
Publicar un comentario